Por Keven Rodríguez.
Santo Domingo Norte no es solo la Avenida Hermanas Mirabal. Este municipio ha experimentado un crecimiento en comercio y población, pero la infraestructura vial no ha acompañado ese avance. Las calles en mal estado, sumadas a la falta de planificación urbana, han agravado el caos del tránsito y la movilidad en la zona.
Otro problema crítico es el desorden urbano. Las aceras y calles han sido ocupadas por el comercio informal, lo que crea un entorno caótico y poco ordenado. Sin embargo, las autoridades locales no presentan soluciones claras ni estrategias efectivas para abordar esta situación.
Pero antes de lanzar juicios apresurados, es importante preguntarnos: ¿qué medidas concretas han implementado las autoridades locales para mejorar la situación? Este municipio necesita un mercado formal y proyectos de infraestructura que favorezcan el orden y el desarrollo. Sin embargo, no vemos ningún impulso real hacia esos objetivos.
Al final, es el gobierno central quien ha tenido que asumir la responsabilidad de problemas que los gobiernos locales han ignorado. Programas como El Gobierno Contigo reflejan que el presidente Luis Abinader no quiere fallarle a la gente, pero al mismo tiempo dejan en evidencia una realidad preocupante: las alcaldías están fallando en cumplir con las necesidades de la comunidad.
Es momento de reflexionar sobre la falta de acción de los gobiernos locales y de exigirles soluciones a la altura de las demandas de los ciudadanos.
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Keven Rodríguez - Analista de Opinión
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